2009/08/28

ARENILLA PARA NADIA VILLAFUERTE (publicada en febrero de 2008)



Me acodo en la ventana de mi cuarto en el segundo piso. Desde ahí veo a Nadia que está en el patio junto a una fuente. Alrededor de la fuente hay diez o doce palomas tomando agua. Nunca he visto físicamente a Nadia pero sé que es ella. Lo sé porque hace barquitos de papel. Aunque, tal vez no son barquitos lo que hace, tal vez son papirolas. Desde acá no distingo bien. ¿Y si le pregunto? ¡Qué haces, Nadia!, grito. Ella se pone la mano sobre la frente para cubrirse del sol que se desparrama sobre el suelo de cemento verde. ¡Nadia no me mira, me ignora, hace como que la virgen le habla! ¿Jugamos?, grito y ella, sin verme sigue dando maíz a las palomas y contesta: ¡Baja!

Miro el tendedero a mitad del cuarto, ahí siguen secándose mis alas que se mojaron en el diluvio del año pasado. No puedo decirle que no puedo bajar porque mis alas siguen mojadas.

Con una hoja de papel hago un avioncito y lo aviento al patio. El avioncito lleva mis preguntas, un mero juego de palabras. Me siento a mitad del cuarto y, con un ventilador, trato de apurar el secado de mis alas.

¡Oigo un aleteo! Pienso que mis alas están regresando a la vida, pero el aleteo proviene de una paloma que se posa sobre el dintel de la ventana. La paloma trae un barquito de papel amarrado a una de sus patas: ¡son las respuestas de Nadia! Ella soltó un barco sobre el cielo porque sabe que los barcos no encallan en las nubes.

Corro a la ventana, saco mi cuerpo, pero Nadia ya no está, las palomas ya no están, sólo existe un charco de agua que refleja el cielo, como si fuera un espejo roto.

Al rato el agua se evapora y no queda nada, nada, Nadia.

Ahora comparto con los lectores de El Heraldo de Chiapas, las respuestas de Nadia.

1.- ¿Qué valles inunda el río de la creación?

Ahora mismo, el valle de Pinar del Río, porque escucho un disco de música cubana y aunque lejos, en este instante, también yo ahí me baño con su brisa… Ah, qué ganas de que me inunde, con su música, un cubano…

2.- ¿Cómo son los hombres que viven en VILLA-DÉBIL?

No conozco a los de Villa-Débil (no sabía de ellos, no estaría nada mal visitarlos un día de éstos), sólo conozco a los de Villa-Fuerte. De sus cinco mil habitantes, todos ocupan mi corazón de condominio, y me mantienen, y los mantengo, e intentamos ser felices, hasta donde nos dure el cuerpo y los celos.

3.- ¿A qué huelen las ventanas de la miseria?

Es curioso, pero según yo, huelen a perfumes caros, a pulcritud, a perfección. Mientras más cochinadas en el cuarto, paradójicamente, más discreción en las ventanas.

4.- Si los poetas tienen musas, ¿por qué se dice que, en lugar de "musos", las narradoras tienen "mozos"?

¿De verdad? ¿Dónde puedo conseguirme uno? Últimamente he estado muy cansada, eso de ser narradora es divertido pero agotador: narrar unas vidas miserables por aquí, otras por allá; y al fin de cuentas, no me explico por qué la vida, esta vida, la real, no me basta como es; por qué me empeño en narrar si hacerlo no me hace más tangible de lo que soy, con mis cincuenta kilos, que son de por sí demasiados. ¿Para qué sirven los mozos a las narradoras? ¡Que alguien me diga por favor! ¿De qué me he perdido? ¿Son iguales a los muñecos inflables? Porque si no tienen máscaras con cierre en la boca, y no me ofrecen un megacontrato en Anagrama mientras me dicen poemas al oído, si no juegan conmigo, entonces mejor no.

5.- Si Becky gana becas y Nadia gana nada, ¿qué gana Daniel?

¡Ah, no…! Nadia tiene qué ganar por lo menos un premio (olvidémonos de las becas, ya tuvimos demasiadas, y al que no le guste pues nos vale), porque con ese premio, Daniel y yo nos iremos a Sayulita, comeremos muchos camarones, nos asolearemos tanto hasta que seamos fuego, y pondremos en la playa una bandera roja, símbolo de que es ahí donde hemos decidido fundar una nueva patria. No la Patria Nueva, que quede claro… Ahí sólo vende ropa de segunda mi abuelita, y se consigue muy mala cocaína.

6.- La gallina, con tanta pluma, se convirtió en escritora, ¿qué vocación parece designar el pico del Tucán?

¡Actor de cine! Digo, si Tom Cruise lo ha hecho con tan seductora nariz… Mmm… Lo digo por envidia: yo habría preferido ser tucán.

7.- ¿Qué le reclamaría Rubens a Botero?

No creo que le reclame nada, más bien le pedirá que un fin de semana lo invite a comer tacos y unas gorditas de chicharrón prensado.

8.- Los infantes juegan a "las escondidas", ¿a qué juegan los llamados "enfant terrible"?

A hacer berrinches frente a los espejos y los reflectores, en el mejor de los casos. En el increíble, a emborracharse y a organizar orgías.

9.- En muchas partes de México se celebra la Feria del Tamal, ¿por qué en ningún lugar se celebra la feria del ta'bien?

Bueno… En ningún lugar las cosas deben estar bien. El mundo es demasiado grande y hay cosas que por fuerza deben ir mal pues el problema con ser buenos y legales es que hay mucha gente haciéndolo y los márgenes se reducen. Creo, en fin, que si las cosas estuvieran bien, sencillamente nos aburriríamos.

10.- ¿De qué región debe provenir el viento que ilumine tu casa?

Del Norte… De preferencia, de Culiacán (no es albur). Y es que, de esa ciudad ha llegado el hombre Géminis (elemento viento, según el zodiaco) que enciende todas las bombillas de mi casa, (y también el bóiler).

(Nadia Villafuerte, nació en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, en el año de 1976. Es una de las narradoras más importantes de su generación. Los lectores de este periódico tienen la fortuna de leer sus “Sirenas y Ondinas”).
ARENILLERO